viernes, 18 de febrero de 2011

El Temor




Otra vez llegó el temor al acercarme de noche a casa, me acomete el horror y quiero volver atrás. Vaya, he vencido el miedo y traspaso el umbral, mi casa está en tinieblas, me causa pavura, corro, frió como el hielo a encender la luz.
Con las sombras se disipan los espantos que me acechan, me siento frente a la chimenea, no quiero dormir pues las pesadillas minan poco a poco mi cordura y se llevan mi tranquilidad, pero intentare dormir, es tarde ya, ese lúgubre reloj así lo indica.
En su inalcanzable altura, la luna se ríe de mi, de mi miedo, temblando como azogado, sudando copiosamente, muriendo lentamente, cierro la ventana, la luna no me mirará mas. Dormir, necesito dormir, aunque sea un poco, pero las escaleras... hileras de dientes burlones, sonrientes, mordaces, parecen la boca de una fiera, esperando y relamiéndose por su presa, cierro los ojos, subo, dos, tres peldaños a la vez.
Por fin llegué, soy salvo, me rió, no hay nada, soy un niño inventando duendes, miro la gran puerta de mi habitación, mi sonrisa se esfuma, esa puerta espera que la abra, ¿que habrá dentro? ¿que ser infernal me espera? ¿que absurda pesadilla? algo acecha allá, escondido, lo siento en la piel, en mis cabellos erizados, me santiguo, abro con los ojos cerrados, acciono el interruptor ¡luz! me salva de nuevo, ahí esta mi lampara, la tomo con cuidado y la enciendo ¡mas luz!
Oh Dios, estoy frente al armario, lo abro, siento un escalofrío recorrer mi espina dorsal, ahí están, no se han ido, me miran con sus cuencas vacías, quiero gritar, llorar, morir, están ahí, no se mueven desde el día que los maté, que acabe con sus miserables vidas, traidores, me engañaron, se burlaron de mi, pero están muertos ya no traicionaran, ya no lo podrán hacer.

Siempre les grito que se marchen, pero no hacen caso, siguen ahí, pudriéndose, horrorizándome, agusanándose, si importarles que los vea.
Esta vez no cerraré la puerta, es mas, la arrancaré, tal vez se vayan, estoy harto de ver sus decrépitos huesos que muestran impúdicamente.
Apunto del desmayo, salgo corriendo, dormiré donde sea y regresaré mañana, ojalá ya se hayan ido.

1 comentario:

mariajO dijo...

Ola!!! Debo decir que me ha gustado esto que lei es desconcertante pero hermoso =)

gracias por suscribirte a mi blog espero que te guste lo que escribo...

Saludos =)